lunes, 24 de junio de 2013

TECNOLOGÍA Y ADOLESCENCIA

El incremento del uso de las TIC en la vida cotidiana es cada vez más creciente, habiéndose masificado su acceso, dentro de las cuales, los adolescentes constituyen el grupo mayoritario de la población.

La naturaleza misma de los adolescentes, los estimula a descubrir, explorar y experimentar, encontrando en las TIC buenos recursos para desarrollar sus capacidades, adquirir información y construir nuevas formas de conocimiento, en el marco de una cultura digital.

En el vídeo Tecnología y Adolescencia (http://www.youtube.com/watch?v=VOKcNDuZos0) se puede constatar que muchos adolescentes usan las TIC no sólo para chatear, comunicarse a través de las redes sociales, divertirse o acceder a información negativa, sino para expresar sus concepciones y su juicio crítico respecto a los riesgos que estos recursos acarrean si es que no son utilizados adecuadamente, convirtiéndose así en Ciudadanos Digitales, conscientes de cuáles son sus derechos y sus deberes al ingresar  al entorno virtual. Por lo mismo, el acceso a este recurso no es dañino si es utilizado con responsabilidad.

Siguiendo con el análisis del vídeo propuesto, se puede distinguir que el grupo responsable de su elaboración, tiene desarrolladas varias capacidades, como:

  1. Manejo de herramientas o recursos tecnológicos.
  2. Creatividad e Innovación: idea del vídeo, formato, imágenes seleccionadas, y otros.
  3. Selección y organización de información: que los ha llevado a utilizar información pertinentes con el mensaje que se quiere transmitir.
  4. Investigación: para construir el vídeo tuvieron que desarrollar sus capacidades de investigación, reflejadas en las conclusiones que se presentan.
Estas capacidades que son fortalecidas con la incorporación de las TIC al currículo, deben ser acompañadas por habilidades sociales, como la autoestima, asertividad, toma de decisiones, resolución de problemas, tolerancia y otros, a fin de que los riesgos a los que se ven sometidos por su condición de vulnerabilidad (debido a las características propias de los adolescentes) sea mínimo. La tarea que nos toca desarrollar a los docentes, en la institución educativa y en el aula, debe ir de la mano con la labor formativa que debe realizar la familia. Podríamos dejar varias preguntas en el aire como ¿sabemos con quiénes interactúan nuestros hijos e hijas adolescentes en las redes sociales?, ¿conocemos cuál es su entorno virtual?, ¿conocemos cuáles son sus direcciones favoritas? ¿cuántas horas del día la pasan usando los celulares, las redes sociales y el internet? 

Referencias:








PRACTICAS PEDAGÓGICAS EN ENTORNOS INNOVADORES DE APRENDIZAJES

Los nuevos entornos de aprendizaje requieren que los docentes asumamos nuevas prácticas pedagógicas, contar la historia de manera diferente, incorporando las TIC a los procesos de aprendizajes que guiamos a los  estudiantes. No se trata de incorporar mecánicamente la tecnología disponible, sino que esta se convierta en un recurso en un medio de aprendizaje, significativo si queremos llamarlo de ese modo.

¿Qué se necesita para innovar en este contexto?, se requiere dos elementos claves: docentes  y escuelas innovadoras, si ambos no van acompasados, todo esfuerzo por cambiar será limitado o nulo completamente. Por lo tanto, los liderazgos directivos de la I.E. son piezas de ese motor llamado educación.

En la siguiente presentación, organizamos la información extraída de las páginas 101 al 107, del documento Prácticas Pedagógicas en Entornos Innovadores, publicado por la OEI y otras organizaciones, sólo tienes que acceder a la siguiente dirección

http://prezi.com/gwhtnhlirkyz/copy-of-untitled-prezi/




LA TECHNÉ ATRAVIESA LA PAIDEA

Estimados amigos y amigas, comparto con ustedes el siguiente enlace, a fin de visualizar la organización de la información del artículo: LA TECHNÉ ATRAVIESA LA PAIDEA,
http://prezi.com/nz48qezqkwax/untitled-prezi/                                              
 
Saludos

¿SOY UN DOCENTE INNOVADOR?

¿Soy un docente innovador? es una pregunta que frecuentemente me formulo para calificar mi práctica pedagógica. 

Para dar respuesta a esta, es necesario que listemos el perfil de un docente innovador (http://www.pixton.com/es/comic/a3t1h439):

1. Observador de la problemática del contexto.
2. Analítico de los aciertos o desaciertos de su trabajo.
3. Proactivo frente a las limitaciones de su contexto.
4. Tolerante frente a las ideas de los demás.
5. Asertivo al comunicarse con sus pares.
6. Autónomo.

Si esto es lo que nos define, puedo señalar y con convencimiento, que apuesto hacia ello, a ser innovadora de mi práctica, porque una característica que me motiva a seguir caminando es que mis alumnos y alumnas desarrollen sus capacidades, sus habilidades sociales y sea mejores humanos. Por lo tanto, siempre estoy buscando respuestas o estrategias que hagan que mis actividades de aprendizaje no se vuelvan rutinarias. 

En mi colegio, no disponemos de muchos recursos, pero nos la ingeniamos para que las actividades de aprendizaje sean siempre interactivos, siendo los estudiantes los que asumen el rol principal. Por ello, hemos venido desarrollando actividades, a manera de proyectos, que terminan en evidencias efectivas de los aprendizajes que realizan.

Un aspecto que debemos tomar en cuenta es que innovar no es una tarea sencilla, supone desaprender y aprender al mismo tiempo, para que nuestro pensamiento convergente se relacione y se articule fuertemente con el pensamiento divergente, para que nuestra capacidad creadora fluya y de respuestas a las condiciones del contexto.

El reto de ser maestros y maestras, todavía sigue en pie. Asumimos esta tarea, cuando decidimos serlo, porque lo que nos satisface es ver las caras sonrientes de chicos y chicas, que nos energizan todos los días, de los 10 meses en que convivimos con ellos y ellas.


LO MEJOR DE MI CRT

LO MEJOR DE MI CRT

Me preguntan ¿cuál es lo mejor de mi CRT y a qué se debe?

La respuesta más clara es que lo mejor de mi CRT son mis estudiantes, porque ávidos por manejar las laptop con las que está implementado, caminan presurosos a su encuentro y compartir con sus otros compañeros la experiencia de buscar información y organizarla en un producto previsto en la sesión de aprendizaje.

El aula de innovación entraña muchas posibilidades de la práctica de valores como la solidaridad, el trabajo en equipo, la tolerancia y otros. Si estos no son añadidos a las actividades de aprendizaje que programamos, las clases sólo serán motivo para seguir con nuestras prácticas tradicionales, convirtiéndola en una actividad rutinaria, fría por la relación que establecemos entre los estudiantes y las máquinas.

Si me preguntan por el equipamiento, les diré que nuestra CRT está compuesta por las laptop (una para cada alumno), un cañón multimedia y su servidor. Tenemos limitaciones con la conectividad cuando funcionan las 22 laptops existentes, sin embargo hemos buscado varias formas para hacer que los chicos y chicas accedan a la información que requerimos para desarrollar las capacidades programadas en el área.

Hay mucho aún que hacer, porque todavía quedan docentes que tienen miedo o indiferencia ante el CRT, pero vamos caminando de a pocos, seguros en cada paso que damos. 

ROL DEL DOCENTE, USO DE TIC Y AMBIENTES DE APRENDIZAJE

Las condiciones en que se desarrolla el mundo actual, se caracteriza por la incertidumbre debido a revolución científica y tecnológica permanente, gracias a la cual la información y el conocimiento se mueven a velocidades vertiginosas. Estas condiciones obligan a que los docentes, actores de proceso educativo y claves en la formación de niños, niñas y adolescentes, adquiramos nuevas capacidades que nos permitan dar respuestas a ellas. A esto se une, que los espacios en donde se desarrollan los procesos educativos, deben adquirir otras características, que les convierta en dinámicos, interactivos, y capaces de generar motivación constante en los estudiantes, respondiendo así a las demandas y expectativas de nuestros estudiantes, quienes, más que nosotros se encuentran vinculados a entornos virtuales y redes sociales, que podríamos aprovechar como pretextos o recursos de aprendizaje.

En este contexto, se requiere que la gestión educativa, dirigida y liderada por los directores asuman una nueva mirada, para mejorarla bajo paradigmas vigentes e ir de la mano con las reformas que desde los órganos de dirección del MED se implementan. En este afán, hemos visto que en los últimos años ha habido un esfuerzo porque las instituciones educativas sean implementados con recursos tecnológicos y herramientas virtuales, acompañados por acciones de capacitación, como los que se brindan a través de Perú Educa.

La respuesta de muchos directores y docentes aún sigue siendo lenta, negándose a asumir nuevos roles y retos educativos, justificando su ineficacia en frases como "es insuficiente", "nos faltan computadoras", "aunque les demos esto a los alumnos, no van a aprender", "los alumnos solo entran al aula virtual para entrar al Facebook", "esto es para los más jóvenes"; incluso como se ha identificado en nuestro medio, estos recursos no han sido puesto a disposición de los estudiantes, permaneciendo las aulas de innovación, cerrados a las actividades de aprendizaje. Contrapuesto a esto, también identificamos docentes, a quienes las TIC han servido para dejar que los estudiantes sean "conducidos" por ellas, asumiendo una posición bastante cómoda pues las actividades de aprendizaje se convierten en búsqueda y copia de información.

Consideramos que la transformación educativa no ocurrirá, mientras los procesos de cambio solo lleguen orientados desde el MED, si no que la revolución educativa es de entera responsabilidad de nosotros los maestros y maestras de este país, que hemos asumido esta tarea convencidos y convencidas del rol formativo que desempeñamos. Dejemos de señalar al bajo sueldo como causa de nuestra inercia.

En ese sentido, el rol del docente requiere:
1. Capacidad para dar respuesta a los cambios, respuesta a la incertidumbre.
2. Fortalecer su rol de mediador afectivo y cognitivo.
3. Capacidades de planificación de actividades de aprendizaje, diseñando entornos de aprendizaje que consideren el uso de las TIC, aprovechando su valor informativo, comunicativo, pero también formativo.
4. Fortalecer sus capacidades de innovación, para dar respuestas a las nuevas demandas y necesidades de aprendizaje de los estudiantes.
5. Desarrollar sus habilidades en el manejos de las TIC y todos los entornos virtuales existentes.


 Podríamos seguir mencionando otras competencias más que nos toca por desarrollar, sin embargo, de todas ellas, consideramos que lo más importante es que como docentes es necesario fortalecer la primera, pues como lo señalamos líneas arriba, los tiempos en que nos tocan vivir, deben obligarnos a ser maestros del siglo XXI, enseñando capacidades y utilizando recursos propios de este siglo. Sólo así, podremos formar hombres y mujeres que también posean condiciones para adaptarse al cambio. Es una exigencia social.